domingo, 15 de marzo de 2015

Podencos Felices: Candela

María José se acuerda a la perfección de aquella noche en que se enamoró de Candela. Era domingo. Concretamente, el 10 de noviembre de 2013. El flechazo surgió a través de red: una amiga suya compartía en el muro de facebook la historia de una perrita en una situación extrema de necesidad, dado su estado. Sin embargo lo que le embriagó de verdad fue aquella mirada tan triste y llena de dolor.

 Imagen de la difusión del caso de Candela.

No le importó su ignorancia total acerca de perros, sus razas y comportamiento, ni tampoco la alergia tan importante que padece su hijo a un montón de cosas: en ese mismo instante realizó una llamada telefónica a su amiga y durante la tarde del día siguiente la llevó a casa, recién operada esa misma mañana.

Aquellas imágenes tan desgarradoras no exageraban nada. Candela fue halla en medio del campo, amarrada a un arbusto con alambre de espinos. El animal intentó zafarse provocándose heridas tan profundas que incluso llegó a seccionarse un músculo.

La pequeña no ladraba ni lloraba. Sólo temblaba. 

Tenía un pánico terrible a los hombres, cuya voz le hacía bloquearse por completo. Fue necesario mucho tiempo y esfuerzo, pero poco a poco la perrita fue perdiendo parte de sus miedos hasta llegar a hacer una vida completamente normal.

Paradójicamente, al tiempo que Candela iba dejando atrás sus traumas ella actuaba como el mejor medicamento para María José, que también atravesaba momentos muy duros tras haber sufrido un accidente que le provocó una lesión grave y desembocó en una depresión importante.

Esta podenquita es muy feliz, pero hay traumas que nunca se olvidan y más cuando has tenido una vida tan dura como la suya.

Hace poco menos de un año, Candela, que está muy unida a su 'mamá humana', se escapó. En realidad quería buscar a María José, pero se perdió y estuvo 13 días fuera de casa. Ese mismo día, un cazador la encontró y no dudó en meterla en una rehala. El infierno comenzaba de nuevo para ella, al tiempo que su familia vivía otro intentando encontrarla cada día.

Y afortunadamente se reunieron de nuevo.

Pero ese incidente supuso un mazazo tan grande que todavía Candela sufre las consecuencias. Los traumas afloraron de nuevo y hoy se autolesiona y en la calle se muestra algo agresiva con los perros al intentar proteger a su dueña, una situación que han de combatir con medicación, juegos mentales y largos paseos.

Desde hace unos meses, nuestra protagonista ha visto la familia incrementarse con la llegada de Abril, una galga a la que adora, aunque no jueguen mucho juntas dada su diferencia de caracteres.


Estoy completamente segura de que con el cariño y el esfuerzo que siempre le ha dedicado su familia a Candela, nuestra pequeña logrará superar todas las adversidades. Ha demostrado ser una luchadora nata que se merece al fin una vida llena de paz, tranquilidad, felicidad y, sobre todo, mucho amor.

Desde este modesto espacio os deseamos todo lo mejor.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Gracias!!! Me he vuelto a emocionar con mi chica.. Me ha encantado

Anónimo dijo...

Candela es una moneria,muy dulce con las personas y seguro q pronto mejorara en los problemillas q os quedan por superar ;)

Kikanuka dijo...

Maravillosa Candela !! muchas felicidades pequeña por esta preciosa familia que tienes,el miedo se olvidará ya lo verás.
Nosotros tenemos a Mak un podenco victima de los cazadores y que con amor como el que tu mami te da a ti conseguiremos que todo lo vivido se olvide.
Besossss